Karla Gerard
. . . Y ahora , muy serenamente y con los ojos cerrados, trata de deshacerte de todo el contenido que generalmente ocupa tu conciencia. Piensa en tu mente como si fuera un círculo inmenso, rodeado por una densa capa de nubes obscuras. Lo único que puedes ver son las nubes, pues parece como si te hallaras fuera del círculo y a gran distancia de él.
Desde donde te encuentras no  ves nada que te indique que detrás de las nubes hay una luz brillante. Las nubes parecen ser la única realidad. Parece como si fueran lo único que se puede ver. Por lo tanto, no tratas de atravesarlas e ir más allá de ellas, lo cual sería la única manera de convencerte realmente de su insubstancialidad. Eso es lo que vamos a intentar hoy.
Después que hayas pensado en cuán importante es para ti y para el mundo lo que estás intentando hacer, trata de alcanzar un estado de perfecta quietud, recordando únicamente la intensidad con la que deseas alcanzar hoy mismo, es este mismo instante, la luz que resplandece en ti. Resuélvete a atravesar las nubes. Extiende tu mano y, en tu mente, tócalas. Apártalas con la mano, y siente como rozan tus mejillas, tu frente y tus ojos a medida que las atraviesas. Sigue adelante; las nubes no te pueden detener.
Folk Art Tree by Karla Gerard
Si estás haciendo haciendo los ejercicios correctamente, empezarás a sentir como si estuvieses siendo elevado y transportado hacia adelante. Tus escasos esfuerzos y tu  limitada determinación invocan el poder del universo para que venga en tu ayuda, y el  Propio Dios te sacará de las tinieblas y te llevará a la luz. Estás actuando de acuerdo con Su Voluntad. No puedes fracasar porque tu voluntad es la Suya.
Ten confianza en tu Padre hoy y certeza de que Él te ha oído y te ha contestado. Es posible que aún no reconozcas Su respuesta, pero puedes estar seguro de que se te ha dado y de que la recibirás. Trata de tener presente esta certeza, según intentas atravesar las nubes en dirección a la luz. Trata de recordar que por fin estás uniendo tu voluntad a la de Dios. Trata de mantener claro en tu mente el  pensamiento de que lo que emprendes con Dios no puede sino tener éxito. Deja entonces que el poder de Dios obre en ti y a través de ti , para que se haga Su Voluntad y la tuya.

MIS PENSAMIENTOS OCUPAN LA LUZ DEL MUNDO EN MI.
UN CURSO DE MILAGROS
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