DESHACIENDO LOS NUDOS
Casi todos hemos tenido la experiencia de tratar de deshacer los nudos en un ovillo de hilo, una cadena de oro, una manguera de jardín o un cable eléctrico. Cuando comienzas a deshacer algunos nudos, resulta ser que, milagrosamente, otros también se van deshaciendo. Al aflojar las cosas en un lugar, repentinamente se produce un alargamiento en la cadena, cable, manguera o hijo. De la misma forma, cuando la Expiación comienza a obrar en nosotros, experimentamos una nueva libertad en nuestro sistema psíquico.
Supongamos que descubro que no necesito volver a beber, ni volver a drogarme. Dejar de beber y e consumir drogas puede deshacer muchos otros problemas.
<> Tal vez descubra que tengo más seguridad, aplomo, confianza y energía para mi trabajo.
<> Tal vez comience a llevarme mejor con mis colegas.
<> Tal vez deje de perder tanto tiempo y ganar más dinero.
Deshacer lo que parecía ser un problema, tiene consecuencias para toda una gama de problemas.
Y esto es lo que el Curso quiere decir por milagro - una liberación - el deshacimiento de algún desorden en mi mente que me impedía ver. De la misma forma en la que las defensas del ego crean mayores desastres, la defensa de la Expiación los deshace. El proceso de la Expiación es el medio a través del cual podemos abandonar aquellos lugares traumáticos hasta llegar a ser totalmente libres - regresando de ese modo a la inocencia y al conocimiento de nuestra existencia.
La Expiación apela a nosotros para que evaluemos todo nuevamente. Al ir soltando todo el material inservible - al abandonar las ilusiones - la verdad de aquello que ya somos se manifiesta por sí misma.
La Expiación nos permite escapar de todo aquello que pensábamos que éramos y facilita de esta manera el proceso de despertar. Aceptar la Expiación significa darnos cuenta de que todas las cosas del ego, que pensábamos que eran reales, no significan nada. Habiendo construido un complicado caso para un sistema psíquico desastroso, ahora me doy cuenta que toda la cuestión no es importante, que no tiene sentido, que es demente y por lo tanto no tiene significado. Es parte de un mundo ilusorio o un sueño. Existe únicamente en el tiempo y el espacio, que también son parte de la ilusión.
Durante el proceso de deshacer estas ataduras o complejos, comenzamos en primer lugar, a observar que en esos lugares no existe nada. Mi ego bien pudo haberse traumatizado o quedarse enganchado con algo, pero ese algo no tiene significado. Bien pude haber inventado algo por sentirme rechazado en mi infancia, formando una herida que creció y causó dolor. Con el propósito de sanar, necesito perdonar o soltar el pasado. De hecho, la Expiación es el proceso a través del cual nos liberamos a nosotros mismos del pasado ( T-2.II.6) Esto es fácil de advertir en un amigo. Podemos reconocer que es en verdad insignificante el lugar en el que parece tener un trauma, que es en verdad intrascendente el tema que le preocupa. Pero es obvio que es mucho más difícil ver esos mismos traumas en nosotros mismos.
Ningún problema, en última instancia, tiene sentido. No son nada. Una vez que el problema se encuentra en el pasado, solemos preguntarnos porqué fue un problema. Probablemente todos hemos tenido la experiencia de quedar traumatizados por una relación que, finalmente pudimos superar. Al tiempo, miramos atrás y no podemos imaginar porqué fue que estábamos tan traumatizados con esa persona en particular.
NO HAY NADA ALLÍ
Cuando deshaces los nudos de una cadena y llegas al final ( o al comienzo), descubres que allí no había nada. En primer lugar, no había nada que causara la existencia de esa atadura, o quizás era solamente una nimiedad algo "rara" que en verdad no era nada. Dicho en otras palabras, el ego origina los nudos en nuestra psique y el ego es nada. Cuando comenzamos a deshacer los desastres que nos hemos hecho a nosotros mismos y todas las cosas se encaminan, vemos que allí no había nada. Nunca lo hubo, simplemente nosotros pensamos que sí. Y eso es la ilusión.
Dr. Jon Mundy
Descubriendo
Un Curso de Milagros
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| Modest Cuixart |
Supongamos que descubro que no necesito volver a beber, ni volver a drogarme. Dejar de beber y e consumir drogas puede deshacer muchos otros problemas.
<> Tal vez descubra que tengo más seguridad, aplomo, confianza y energía para mi trabajo.
<> Tal vez comience a llevarme mejor con mis colegas.
<> Tal vez deje de perder tanto tiempo y ganar más dinero.
Deshacer lo que parecía ser un problema, tiene consecuencias para toda una gama de problemas.
Y esto es lo que el Curso quiere decir por milagro - una liberación - el deshacimiento de algún desorden en mi mente que me impedía ver. De la misma forma en la que las defensas del ego crean mayores desastres, la defensa de la Expiación los deshace. El proceso de la Expiación es el medio a través del cual podemos abandonar aquellos lugares traumáticos hasta llegar a ser totalmente libres - regresando de ese modo a la inocencia y al conocimiento de nuestra existencia.
La Expiación apela a nosotros para que evaluemos todo nuevamente. Al ir soltando todo el material inservible - al abandonar las ilusiones - la verdad de aquello que ya somos se manifiesta por sí misma.
Durante el proceso de deshacer estas ataduras o complejos, comenzamos en primer lugar, a observar que en esos lugares no existe nada. Mi ego bien pudo haberse traumatizado o quedarse enganchado con algo, pero ese algo no tiene significado. Bien pude haber inventado algo por sentirme rechazado en mi infancia, formando una herida que creció y causó dolor. Con el propósito de sanar, necesito perdonar o soltar el pasado. De hecho, la Expiación es el proceso a través del cual nos liberamos a nosotros mismos del pasado ( T-2.II.6) Esto es fácil de advertir en un amigo. Podemos reconocer que es en verdad insignificante el lugar en el que parece tener un trauma, que es en verdad intrascendente el tema que le preocupa. Pero es obvio que es mucho más difícil ver esos mismos traumas en nosotros mismos.
Ningún problema, en última instancia, tiene sentido. No son nada. Una vez que el problema se encuentra en el pasado, solemos preguntarnos porqué fue un problema. Probablemente todos hemos tenido la experiencia de quedar traumatizados por una relación que, finalmente pudimos superar. Al tiempo, miramos atrás y no podemos imaginar porqué fue que estábamos tan traumatizados con esa persona en particular.
" La Expiación es el medio a través del cual
puedes liberarte del pasado a medida que avanzas.
La Expiación desvanece los errores que cometiste en el pasado,
haciendo de este modo innecesario
el que sigas volviendo sobre tus pasos".
T-2.II.6:4-5
NO HAY NADA ALLÍ
Cuando deshaces los nudos de una cadena y llegas al final ( o al comienzo), descubres que allí no había nada. En primer lugar, no había nada que causara la existencia de esa atadura, o quizás era solamente una nimiedad algo "rara" que en verdad no era nada. Dicho en otras palabras, el ego origina los nudos en nuestra psique y el ego es nada. Cuando comenzamos a deshacer los desastres que nos hemos hecho a nosotros mismos y todas las cosas se encaminan, vemos que allí no había nada. Nunca lo hubo, simplemente nosotros pensamos que sí. Y eso es la ilusión.
Dr. Jon Mundy
Descubriendo
Un Curso de Milagros
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